Ángel Gil Cheza
Editorial: Suma de Letras
Fecha de publicación: 2014
Nº de páginas: 256
Empieza con un envío de cartas dirigidas a varias personas, se busca a una persona pero ni siquiera se sabe si es un hombre, una mujer o un niño. Reconozco que me perdí y tuve que releer el principio pero este arranque captó mi atención.
Cuando Enda Berger aparece comienza una lectura intrigante.
Arthur Font, un escritor, muere repentinamente dejando como heredera a su esposa, a su hija y a una mujer desconocida que tiene que viajar desde Irlanda y mientras decide qué hacer con el cobertizo las dos mujeres se van conociendo en una convivencia complicada, en la que se descubrirán los secretos del hombre que arreglaba las bicicletas. La hija adolescente, una absoluta desconocida para su madre, será el personaje que hace mantener una actitud adulta a estas dos mujeres.
Tengo la sensación de haber leído dos historias con estilos diferentes. La historia de Arthur y Enda Berger, un amor romántico, verdadero, tierno y que se mantiene a lo largo de los años y la historia de Enda Font, la hija adolescente de Arthur y Noelia, que vive los sucesos más traumáticos del libro y es aquí donde el lenguaje del autor se muestra mas directo, dice lo que quiere decir sin concesiones literarias.
Pasamos de una bella historia de amor mantenido en el tiempo y la distancia, a las desventuras de una muchacha un tanto alocada.
Es un libro muy entretenido que me ha dejado un poco desconcertado.
Cuando Enda Berger aparece comienza una lectura intrigante.
Arthur Font, un escritor, muere repentinamente dejando como heredera a su esposa, a su hija y a una mujer desconocida que tiene que viajar desde Irlanda y mientras decide qué hacer con el cobertizo las dos mujeres se van conociendo en una convivencia complicada, en la que se descubrirán los secretos del hombre que arreglaba las bicicletas. La hija adolescente, una absoluta desconocida para su madre, será el personaje que hace mantener una actitud adulta a estas dos mujeres.
Tengo la sensación de haber leído dos historias con estilos diferentes. La historia de Arthur y Enda Berger, un amor romántico, verdadero, tierno y que se mantiene a lo largo de los años y la historia de Enda Font, la hija adolescente de Arthur y Noelia, que vive los sucesos más traumáticos del libro y es aquí donde el lenguaje del autor se muestra mas directo, dice lo que quiere decir sin concesiones literarias.
Pasamos de una bella historia de amor mantenido en el tiempo y la distancia, a las desventuras de una muchacha un tanto alocada.
Es un libro muy entretenido que me ha dejado un poco desconcertado.
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